
“Estoy seguro que César goza
de la presencia de Dios y está orando para que su familia obtenga la justicia
del gobernante actual y puedan vivir en paz”, manifestó el pastor Samuel
Aguilar Curi, quien presidió el acto litúrgico.
En el oficio religioso,
dirigido por la laica María Cabanillas, fueron conmovedores los testimonios de
la hermana mayor de César, Magaly y de su padre Dionisio. Magaly narró como
ella lo enviaba a la iglesia para que él le contara lo que había aprendido y su
padre Dionisio mencionó que, durante los
veinte días en los que buscó sin desmayo a su hijo, la Biblia que le perteneció
le sirvió de consuelo y fortaleza.
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