Por: Marco Martos
dijeron
y es verdad que he comprobado,
otras cosas se callaron las personas
que en dar informes se solazan:
en Lima cada coche, cada cola, cada rueda,
sardinas y presagios,
sudores ajenos
y humos robustos
sin quererlo respiramos;
en Lima hay un desprecio
por las gentes de otros lares
y a la larga uno añora
a su pueblo, a
su gente, a sus calles.
(*) Poeta de la generación del 60, actual presidente
de la Academia de la Lengua del Perú.
Rincón
literario de URPI para los que inspiran sus acciones en la lectura.
Boletín virtual de los sábados.
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