Irán siguió los pasos de Estados Unidos
y se sumó a los ataques aéreos contra posiciones de Estado
Islámico en Irak, aseguró ayer el Pentágono, que afirmó al mismo tiempo que los
bombardeos no se están realizando en conjunto En tanto, hoy el
gobierno de Hassan Rohani prefirió mantener el misterio, sin confirmar ni
desmentir la noticia.
La vocera del Ministerio de Exteriores de Irán, Marzie Afjam, eludió
pronunciarse sobre la afirmación del Pentágono de que aviones iraníes están
bombardeando posiciones del grupo jihadista en Irak, y se limitó a señalar que
"no ha habido cambios" en su política de apoyar al país vecino.
"He dicho que no ha habido cambios en las políticas de la República
Islámica de Irán cuando se refiere a ofrecer ayuda y consultas a los oficiales
iraquíes en su campaña contra los grupos takfirís (extremistas suníes) y el EIIL
(Estado Islámico de Irak y Levante)", declaró la vocera, tras ser
interpelada sobre la cuestión en su conferencia de prensa semanal en Teherán.
"En referencia a la cooperación militar, no verificamos esa
noticia, así que no se ha efectuado ningún cambio en nuestra política. Irán
todavía está ofreciendo ayuda, especialmente militar, y asesoramiento. Quiero
decir militar dentro del marco de las convenciones internacionales y también
ofreciendo asesoramiento a ese nivel", precisó Afjam, informó la cadena de
noticias pública Press TV.
El Ejército iraní trabaja en el terreno asistiendo a las milicias
chiitas así como a unidades del Ejército iraquí, pero es la primera vez que se
informa sobre ataques aéreos llevados a cabo por cazas iraníes contra el grupo
sunnita ultrarradical. El gobierno chiita iraní puso además a disposición de
Bagdad aviones Sujoi Su-25.
Fuentes del Pentágono afirmaron que cazas iraníes llevaron a cabo los
"últimos días" ataques aéreos contra el Estado Islámico en el este de
Irak.
"Tenemos indicaciones de que lanzaron ataques aéreos con aviones
F-4 Phantoms en los últimos días", dijo el portavoz del Pentágono, el
contraalmirante John Kirby.
Sin cooperación con Estados Unidos
Afjam rechazó hoy que su país esté desarrollando ningún tipo de cooperación
en Irak con Estados Unidos, enemigo de la República Islámica desde la
revolución de 1979 y país con el que no mantiene relaciones bilaterales, pese a
que ambos están tratando de ayudar a Bagdad en su lucha contra el EI.
"Todas las informaciones sobre cooperación entre Irán y fuerzas
militares de otros países en la lucha contra los terroristas [en Irak] son
inexactas", dijo la portavoz sin mencionar a Washington.
Ayer, el portavoz del Pentágono, contraalmirante John Kirby, también
hizo declaraciones en este sentido y señaló que "no ha cambiado nada en
nuestra política de no coordinar acción militar con Irán".
Estrategia global
Mientras tanto, los casi 60 países miembros de la coalición contra el
grupo Estado Islámico están reunidos por primera vez en Bruselas para analizar
su "estrategia global" contra Estado Islámico.
El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que preside el
encuentro, indicó al comenzar el cónclave que se trataba de "planificar
con cuidado los próximos meses". En la reunión no participan
representantes iraníes.
Al comienzo del encuentro ministerial, que se lleva a cabo en la sede de
la OTAN "por cuestiones logísticas", Kerry indicó que la coalición
llevó a cabo "unos 1000 ataques aéreos" desde que comenzaron los
bombardeos aéreos en agosto en territorio iraquí. Francia, Australia, Gran
Bretaña, Canadá, Dinamarca, Bélgica y Holanda se unieron a las operaciones de
Estados Unidos.
"Ninguna unidad importante de Daesh [acrónimo árabe de Estado
Islámico] puede desplazarse sin inquietarse de lo que pueda caerle sobre la
cabeza", aseguró Kerry. "La reunión marca nuestra determinación para
degradar y derrotar [a EI]", añadió.
En esta amplia coalición montada para derrotar a este grupo cuyo avance
relámpago en Siria e Irak sorprendió al mundo, decenas de países ayudan
suministrando armas, principalmente a las autoridades kurda en el norte de
Irak, o compartiendo informaciones de inteligencia.
Esta campaña permitió a las fuerzas armadas iraquíes frenar el avance de
los yihadistas y recuperar terreno. Los bombardeos permitieron asimismo repeler
a EI en el emblemático sitio que mantuvo en la ciudad siria de Kobane, en la
frontera con Turquía (Fuente: AFP y EFE).
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