El Papa Francisco llegará hoy por
la tarde a Bolivia, después de visitar Ecuador, en el inicio de una gira
sudamericana que terminará el 13 de julio en Paraguay, 27 años después que su
antecesor Juan Pablo II visitara este país andino, con una población
mayoritariamente indígena y católica.
Dos millones de feligreses
provenientes de todas las regiones de Bolivia y de Argentina, Chile, Perú y
Brasil coincidirán con la llegada del Sumo Pontífice a las ciudades de El Alto,
La Paz y Santa Cruz.
A las 16:45 hora locales
(20h45 GMT), el primer jefe de la Iglesia Católica de origen latinoamericano,
llegará a la ciudad boliviana del El Alto, ubicada a 4.000 metros de altura
sobre el nivel del mar.
De mayoría católica, pese a que
su código político le declara Estado laico, Bolivia ha desplegado cerca de
40.000 uniformados para custodiar al Santo Padre que se ha dicho dispuesto a
mitigar los efectos de la puna o mal de altura, masticando un puñado de hojas
de coca.
El presidente boliviano Evo
Morales le esperará en el terminal aéreo de El Alto, desde donde descenderá, en
caravana, a la ciudad de La Paz por una carretera de 12 kilómetros, señaló la
agencia oficial ABI.
En este trayecto, Francisco se
detendrá en un recodo del camino donde hace 35 años fuera asesinado el
sacerdote jesuita de origen español, Luis Espinal, defensor de los derechos
humanos, durante el régimen militar, el 19 de marzo de 1980. Luego de
rendirle homenaje, Francisco seguirá hacia La Paz, donde se reunirá con Morales
en el presidencial Palacio Quemado.
Francisco también se reunirá
con la curia boliviana antes de embarcarse a la ciudad oriental de Santa Cruz,
a 900 km de La Paz, donde el jueves celebrará una misa al aire libre en una
plaza pública.
La misión apostólica de
Francisco a Bolivia implica una visita a los internos de Palmasola, la cárcel
más hacinada y violenta de Bolivia en la ciudad de Santa Cruz.
Durante la inauguración, en
Santa Cruz, del II Encuentro Mundial de Movimientos Sociales, Evo Morales
resaltó el martes los puntos coincidentes del proceso de cambio que vive
Bolivia con los ideales y criterios del Papa.
El primer presidente indígena
de Bolivia destacó el papel jugado por la Iglesia católica y principalmente por
Francisco, quien se esfuerza, dijo, por cambiar la historia respecto a estos
temas que constituyen un mal para la sociedad.
Recordó que uno de estos males
es la mala distribución del dinero y que, por lo tanto, es necesario buscar
políticas de cambio, de redistribución de las riquezas.
El pontífice de origen argentino de 78 años
partirá este viernes 10 de julio a Paraguay, donde permanecerá, 3 días, igual
que en Ecuador y Bolivia, antes de volver al Vaticano (Fuente: AFP).
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