El Consejo Nacional
Electoral (CNE) de Venezuela echó el último fin de semana un balde de agua fría
sobre la oposición venezolana al señalar que considera “irreversible” el
triunfo de Nicolás Maduro, pues no cree que el nuevo recuento de votos cambie
el resultado.
Para la titular del CNE,
Tibisay Lucena, el país no debía hacerse falsas expectativas acerca de los
resultados de la auditoría.
La vicepresidenta del
mencionado organismo, Sandra Oblitas (una de las cuatro rectoras electorales
cercanas al chavismo, de un total de cinco que dirigen el CNE), calificó el
sábado de “irresponsables” a quienes siembran falsas expectativas y fue tajante
al afirmar que, en lo que corresponde al organismo “el acto electoral ya
concluyó”, sus resultados serían “irreversibles” y no existiría tal cosa como
un recuento manual de votos.
El único miembro vinculado
a la oposición en el CNE, Vicente Díaz, dijo que, en sentido estricto, la rectora
Oblitas tiene razón: la revisión no revierte resultados, pero “si en el
transcurso de la auditoría se determinan irregularidades, esas son sujetas a
impugnación en las mesas donde las hubo” (Fuente: El País).
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