La mujeres que desarrollan
sus actividades en el espacio territorial rural son aquellas que cultivan la
tierra, crían animales mayores y menores, transforman los alimentos que
producen, los llevan al mercado, reciben a los visitantes en sus casas, comparten
sus costumbres, venden su fuerza de trabajo, curan con plantas medicinales,
conservan la biodiversidad y poseen conocimientos y saberes ancestrales,
precisa el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán.
Para la antropóloga y
experta en políticas públicas y desarrollo social, Tania Villafuerte Villasante,
“referirse a la mujer rural es ya un reconocimiento en nuestra sociedad. Sin
embargo, anota, debe ser vista desde su propia diversidad y heterogeneidad a
fin de poder conocer con mayor profundidad sus posibilidades y necesidades
diferenciadas para lograr la equidad de género, objetivo que requiere aún de
mayores esfuerzos individuales y colectivos”.
La presidenta de la Asociación Nacional de Productores Ecológicos del
Perú (ANPE), Marisol Medrano, manifiesta que “como productora y dirigente de
ANPE, veo con agrado que en los últimos años existe una mayor valoración a los
hombres y mujeres del campo. En la última feria gastronómica Mistura, por
ejemplo, fue muy grato ver el reconocimiento de miles de personas a los
productos que cultivamos día a día y a quienes los producimos. Lamentablemente,
esta valoración social no se traduce aún en políticas públicas que fortalezcan
nuestro trabajo diario”, acota.
En un pronunciamiento, emitido este año por las participantes del
proyecto Justicia Climática, Seguridad Alimentaria y Mujer Rural; Una apuesta
concertada para el empoderamiento económico y desarrollo con equidad de
productoras rurales del Norte y Sur Andino del Perú, las mujeres rurales
plantearon a los gobiernos locales y regionales, entre otras propuestas,
“impulsar la conservación y almacenamiento de semillas recuperando las
prácticas ancestrales de las mujeres, acompañada de asistencia técnica y
capacitación en nuevas tecnologías”. Lo mismo que “aprobar ordenanzas para la
producción y consumo de productos orgánicos nutritivos de las zonas, dando
prioridad a los cultivos de las mujeres” (Foto: Michel Marceau).
No hay comentarios:
Publicar un comentario